Triste Polizonte – Sociedad de la media noche (2018)
En esta ocasión les presentaré un proyecto de post rock-ambient originario de Tijuana, México: Triste Polizonte. Este proyecto, con sus melodías tenues y melancólicas, nos lleva a experimentar cierta sensación de saudade, cierta nostalgia por un pasado perdido, nos lleva a emprender viajes instrospectivos para reencontrarnos con nuestro yo del pasado, para hacernos recordar lo que hemos dejado atrás, lo que ya no volverá.
Con influencias de grandes bandas del género, como lo son Austin TV, Sigur Rós, Godspeed you! Black emperor, Caspian y Mono, definitivamente es una excelente propuesta para quienes gustan de este género.
Historia del proyecto
Triste Polizonte nació en el 2017, cuando Ri’ Les (guitarra y pianos), por motivos personales, es sacado de su antigua banda Spilman; fue en ese momento que, por la molestia que le había causado dicho inconveniente, decidió iniciar un proyecto en solitario, para demostrar que no necesitaba de una banda para seguir tocando post rock. Es así que nació Sad Police, que, con el pasar de algunas semanas, cambió su nombre a Triste Polizonte; cabe mencionar que dicho cambio de nombre se debió -en palabras de Ri’- a que «quería mantener el rasgo de ser mexicano, y a pesar de hacer música dentro de un género que tenía su auge en el extranjero, quería respetar el linaje».
El proyecto nació específicamente el 26 de noviembre de 2017, el día en que Ri’ se presentó por primera vez en vivo con su nuevo proyecto en solitario. A partir de ese momento continuó presentándose en eventos pequeños. Y fue en estas primeras semanas que también decidió meterse al estudio a grabar lo que sería su primer EP, Sociedad de la media noche. Hasta ese momento el proyecto seguía siendo de un sólo miembro.
Pero el 12 de enero del 2018, día en que Ri’ compartía escenario con Shit Metaphore, éste se encontró en el evento a Danny Void (samplers, batería y piano), quien le propuso añadirle baterías al proyecto, para acentuar los matices y las dinámicas; la propuesta fue tomada a bien por Ri’, y fue así que, una semana después de dicha conversación, Danny se compró una batería y el proyecto comenzó a tener dos miembros.
Ri’, al haber comenzado su proyecto en solitario se había acoplado a ello, y el hecho de incorporar un nuevo miembro le representó cierta dificultad, tal como él mismo lo comentaba: «Al principio fue difícil, es decir, las canciones del primer EP las compuse pensando en que no habría otro instrumento, que sólo sería la guitarra y ya estaba, entonces cuando es agregó Danny todo se nos hizo bolas. Trabajar con un looper y una batería es algo bastante complicado, más cuando el loop lo estás grabando en el momento».
Sin embargo, a pesar de las dificultades, el proyecto continuó. Cabe mencionar que para el segundo EP, se intentaron incluir las canciones del primero, pero incorporándoles la batería, lo que no fue posible en su totalidad, ya que al final sólo se quedaron con dos canciones del primer EP, a saber: El agujero cerca de tu jardín y El fantasma de las escaleras. Es así que con esas canciones, y otras cinco nuevas, nació la segunda producción de la banda: Historias de media noche.
El proyecto no tiene mucha trayectoria, ya que, como lo comentaba el guitarrista y fundador, en su ciudad el género del post rock no tiene mucho movimiento. Sin embargo podría destacarse el hecho de que Worldhaspostrock (un canal dedicado a la difusión de albums del género, que cuenta con ¡98,312 suscriptores!) ha compartido sus 2 EPs, así como también el hecho de que su segundo EP fue incluído entre los 50 discos latinos más salados de 2018 por la revista digital ultramarinos.co.
Post rock y saudade
Tómame, oh noche eterna, en tus brazos
y llámame hijo.
Yo soy un rey
que voluntariamente abandoné
mi trono de ensueños y cansancios.
Mi espada, pesada en brazos flojos,
a manos viriles y calmas entregué;
y mi cetro y corona -yo los dejé
en la antecámara, hechos pedazos.
Mi cota de malla, tan inútil,
mis espuelas, de un tintineo tan fútil,
las dejé por la fría escalinata.
Desvestí la realeza, cuerpo y alma,
y regresé a la noche antigua y serena
como el paisaje al morir el día.Fernando Pessoa, Abdicación.
Todas las bandas suelen tener características propias, temáticas que les caracterizan. En Triste Polizonte los temas recurrentes son: la niñez, lo spooky y la nostalgia. Por medio de sus canciones, Ri’ y Danny, buscan hacernos emprender viajes nostálgicos e introspectivos a nuestro pasado, para llevarnos al encuentro de nuestros fantasmas que quedaron allá, pero también para llevarnos a nuestros años de infancia, a la época de la inocencia, a la que, para muchos, fue nuestra mejor época.
O quizás no necesariamente sea la infancia, ya que puede llevarnos a cualquier época, a cualquier momento de nuestro pasado que haya sido mejor que nuestro presente; y de hecho, ese es el objetivo del proyecto y su música: tocar hebras del pasado, posicionar al oyente en algún momento agradable de su vida, permitirle sentir, oler, saborear el momento, en fin, lo que buscan Ri’ y Danny con sus melodías es que quienes le escuchan se sumerjan en la nostalgia.
Sociedad de la media noche (2018)
Cada línea que recorre la cerca que divide tu jardín del mío calla mis secretos, calla en su regazo las bromas que le hice a papá. Y justo por el agujero que divide un extremo del otro puedo ver tu cabello danzar, menearse de un lado a otro, disipándose con el viento, anmarañándose con el frío, acurrucándose con la posibilidad de saltar, de venir a jugar conmigo…
(Triste Polizonte, El agujero en la cerca de tu jardín)
Es con estas palabras que da inicio este EP que, de inicio a fin nos sumerge mentalmente en un ambiente nostálgico, en un pasado infantil e inocente, en el que la inconsciencia de la infancia nos suavizaba el peso de la existencia.
Es así que la canción con la que se abre el disco (El agujero en la cerca de tu jardín), comienza introduciéndonos a la calma, como preparándonos para el viaje introspectivo por el que el disco nos va a conducir, con esa guitarra suave, tranquilizante… y el sampler que, con la voz infantil, compagina perfectamente con el aura tranquila que esa primera melodía nos transmite.
Luego suena Bonita, la segunda canción del disco, que, al ser instrumental en su totalidad, nos permite divagar, deja que nuestra mente siga libremente su camino en el viaje musical-nostálgico en el que Ri’ y su guitarra nos sumergen. De igual manera, la tercera canción (No nos gusta el sushi), al no llevar letra tampoco, deja que nuestros pensamientos lleguen al punto más alto del viaje, para poder desde ahí experimentar, por medio de la imaginación, un retorno al pasado perdido e inalcanzable, a aquellos tiempos mejores.
Pero luego llega Comala, la cuarta canción, que nos recuerda que esto no es más que un viaje, un buen recuerdo de algo que quedó atrás, que se quedó «allá»… sin embargo, antes que finalice el disco, la última canción (El fantasma de las escaleras) nos hace recobrar la calma, haciéndonos sentir tranquilos de nuevo, recordándonos que ese pasado perdido aún habita en nosotros, que, aunque ya lo lo veamos, siempre podemos acudir a él cuando el presente nos asfixie, que anda siempre con nosotros, como un fantasma que nos cuida…
Y bueno, para cerrar esta reseña, les comparto esta hermosa sesión de Ri’ en la casa de Danny…
Agradecimientos especiales a Ri’ Les, guitarrista, por haberme proporcionado información y fotografías.
Un comentario
K. De Trop
Reblogueó esto en Coeur Faibley comentado:
Hola a todos, nada más pasaba a compartirles mi primera reseña que escribí para el nuevo blog en el que colaboro: Cielos Ciegos…
Pueden pasar a leerme, espero que les guste.